Gran catedral del vino
Una catedral del vino es, en el ámbito catalán, una bodega cooperativa con nave de gran envergadura construida al estilo modernista aproximadamente entre 1910 y 1920. La denominación fue creada por Àngel Guimerà para referirse, inicialmente, a la bodega Cooperativa de la Espluga de Francolí y se extendió posteriormente a la bodega Cooperativa de Gandesa y otras bodegas similares. El cuerpo central está formado por dos naves de tinas cubiertas con arcos parabólicos y bóvedas de ladrillo y arcos perpendiculares a la puerta de entrada. Las dos naves están cubiertas a diferente altura, lo que permite la entrada de luz y una menor dimensión de las vueltas de cubierta. Tras las dos naves centrales hay una tercera, más alta y estrecha, cubierta con bóveda tradicional donde se realizaba la recepción de la uva.
En el exterior, junto a la carretera, unas marquesinas de hormigón armado cubren las tolvas donde entra la uva. Sobre el muro exterior de la nave de recepción se apoyan los dos depósitos de agua, similares a los campanarios de las catedrales, uno de ellos situado en un ángulo y soportado a partir de un ingenioso pie de obra. Como decoración hay varias gárgolas de cerámica esmaltadas en verde, pequeñas baldosas que decoran los depósitos y el escudo de la entidad, realizado por el ceramista Xavier Nogués con azulejos, situado en el ángulo del edificio (destruido durante la guerra y sustituido por una reproducción de menor calidad).
Las grandes dimensiones y los depósitos de agua como campanarios, hacen que estas construcciones se conozcan como catedrales del vino.